Cada vez más personas están interesadas en proteger y consentir su piel. Ahora no se trata solo de un asunto de querer verse bien, estamos avanzando hacia un punto donde hace parte de nuestra salud. Si bien existen diferentes pasos en la rutina diaria de cuidado de la piel, en ocasiones se suele dejar de lado la exfoliación facial. En Quimiderm te contamos cómo incluirla y cuáles son las alternativas y el mejor momento para realizarla.
¿En qué punto se incluye la exfoliación facial?
Sin importar el tipo de piel o las necesidades que tuvieras que atender como resequedad, comedones o exceso de grasa toda rutina de cuidado facial debe tener en cuenta tres momentos:
1. Limpieza profunda: En este paso se elimina la suciedad, el sebo y el polvo que acumula la piel. La limpieza facial diaria se debe realizar tanto en el día como en la noche y debe ser acorde a tu tipo de piel y las necesidades puntuales que tengas.
3. Protección solar: No importa si es invierno, no hay sol o si está lloviendo. La mayoría de los resultados positivos de tu rutina de cuidado dependen de utilizar protección solar cuando se está en exteriores.

Tras conocer los tres momentos básicos para el cuidado de la piel ¿dónde se incluye la exfoliación facial? Si bien no está contemplada entre los pasos básicos, es excelente como complemento ya que desobstruye los poros con más facilidad y eliminan las impurezas atrapadas en la piel. La exfoliación es un proceso en el que se acelera la renovación celular y por ello la piel queda más brillante, tersa y suave.
Entendiendo qué hace, lo normal es que la exfoliación facial se incluya justo después de la limpieza. Se trata del enfoque más usual porque permite purificar al máximo antes de tratamientos más específicos. Sin embargo, no es el único momento en el que puede hacerse. También es posible que un solo producto cumpla tanto con la limpieza como con la exfoliación simplificando aún más tu rutina de cuidado.
Opciones para tu exfoliación facial
En Quimiderm entendemos que tener la posibilidad de elegir entre una y otra opción te brinda más herramientas para cuidarte. Por eso contamos con un producto ideal para cada escenario, conócelos a continuación:
- Aunque no es considerado un exfoliante, si tu piel es sensible, seca o se enrojece con facilidad, este es ideal para ti. Una fórmula suave con ácido láctico que brinda una limpieza integral sin afectar el manto hidrolipídico de la piel.
- Dermalim Scrub exfoliante: Si requieres una exfoliación más completa, este producto te va a encantar. Contiene microesferas, ácidos frutales y extractos naturales para brindar un efecto que reduce a gran escala las células muertas y las demás impurezas. Se trata de un producto que si bien impacta en profundidad tus poros no raya la superficie de la piel ni genera daños en los tejidos.
Ahora lo sabes, si decides juntar la limpieza y la exfoliación facial en el mismo paso el gel espumoso es tu aliado clave y puedes usarlo de manera diaria. Aunque si prefieres que sean dos momentos independientes en tu rutina de cuidado facial es recomendable que uses el Scrub exfoliante máximo dos veces a la semana. Así obtendrás todos sus beneficios sin debilitar la barrera de tu piel.

Otros puntos claves con la exfoliación facial
Ahora que sabes en qué punto incluir este proceso dentro de tu rutina, es pertinente tener claros dos puntos muy importantes. Como la exfoliación acelera el proceso de renovación celular, puede quedar sensible si no tienes los cuidados necesarios. Por ello evita los siguientes escenarios.
Exfoliaciones con productos inadecuados
En redes sociales e internet abundan decenas de tutoriales o recetas para hacer exfoliantes caseros. Si bien los productos naturales pueden ser muy útiles para la piel, la forma ideal para incluirlos es como extractos dentro de fórmulas controladas y testeadas por expertos.
Así que evita una exfoliación facial con azúcar, procesados de frutas, café e incluso limón porque estarás comprometiendo la salud de tu piel. Además, dificultan los siguientes pasos de tu rutina y es posible que ni con una hidratación profunda logres equilibrar la resequedad que se produzca.
No olvides la protección solar
Por lo general si decides separar la limpieza y la exfoliación con dos productos, lo más recomendable es que exfolies tu piel solo en las noches. Independiente de si haces una leve exfoliación diaria o es dos veces a la semana siempre debes cuidarte del sol. Los resultados de tu rutina pueden verse afectados si no incluyes un protector solar adecuado para tus necesidades y que evite daños por rayos UVA y UVB.
¡Conoce más con nosotros!
Si quieres aprender más sobre la exfoliación facial y muchos más tips para el cuidado de tu piel y mejorar la efectividad de tu rutina no dudes en contactarnos. En Quimiderm te acompañamos a cuidar de ti poniendo a tu disposición productos confiables de alta calidad que respetan tu cuerpo.